sábado, 23 de abril de 2011

Una flaca que no conozco

No te conozco. Solo sé de vos porque alguien me contó. Pero lo que me contaron de vos no fue muy bonito, me describieron tu reacción ante una situación, y ante eso puedo decir que sos una histérica. Te lo digo con todo el cariño que le puedo tener a una flaca que no conozco. A ver, vos no tenés la culpa. Incluso, por ahi podrías caerme bien. Pero lo veo difícil dadas las circunstancias. Porque le gustas, cuando él me gusta. Le gustás, y él me gusta. Yo gusto del que gusta de vos. ¿Se entiende? Y eso me hace sentir muy mal, porque se supone que soy su amiga. Demuestro ser su amiga, porque también me gusta serlo. Vos tambien eras su amiga, pero en aquella situación que me describieron, no te comportaste como tal. Ni amiga del que gusta de vos, ni amiga de tu amiga. La cagaste, y yo no creo que fuera por accidente. Sí, me estoy metiendo en temas que no me incumben ni me importan, pero en este momento tengo ganas de buscarte aspectos negativos. Al pedo, porque él sigue gustando de vos. Já. 
Podría mejor descargarme con él. En realidad yo ya sabía que le gustabas, era muy obvio. Por lo que sé de él, me extrañaba que tuviera tal reacción de desesperación cuando vos te enojaste. Pero bueno, como pasaban las semanas y seguían sin establecer contacto, e incluso el susodicho negaba sentir algún tipo de atracción hacia vos, zanjé el tema pensando "Ya lo va a superar. Acá estoy yo, cualquier cosa". Qué pelotuda. Cuando me propuse ser su amiga ya sabía que corría el riesgo de que pase esto. Así que en realidad no me corresponde descargar mi bronca celosa con vos, ni con él. La única culpable soy yo. Es re loco como siempre llego a esta conclusión. La única culpable de todo lo que me pasa soy yo. Qué mierda. Ya no tengo más ganas de putearte. Porque sos simplemente una flaca que no conozco. Y al que me gusta, no le gusto; en cambio, gusta de vos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario