Sí, me copé con los videos. Pero esta canción tenía que subirla con música y todo, sino la entrada no tendría sentido. En estos momentos la estoy escuchando con los auriculares a todo volumen. Siento como los violines del minuto 0:45 en adelante se meten por mis oídos, bajan por la garganta y se expanden en el pecho como si fuera líquido. No, más liviano.. como si la música fueran moléculas gaseosas. Pero pesadas como la humedad. Pero no tan así, porque te da la sensación de calorcito. Ni agua, ni gas.. es como fuego; ese fuego suavecito, tibio, hermoso. Me da escalofríos, se me tensan los hombros de la impresión. Me trasmite esa sensación de dulzura al principio, una misteriosa dulzura, que se va descubriendo de a poco, que cada vez se muestra un poco más. Hasta que empieza a caminar, a un paso vivo, animado, rítmico y deslizante a la vez. Como que la melodía te abraza, te envuelve. Te sujeta firmemente y te levanta por los aires. Volás. Pasás por encima de pueblitos pintorescos, después viene una verde llanura, un bosquecito y otra vez pueblitos. Sos una brisa. Es romántica, emocionante, aventurera y valiente a la vez. Independiente pero a la vez atada. Pero no esclavizada.. sino vinculada.
Esta canción en particular me trasmite muchas cosas, cada vez que la vuelvo a escuchar descubro sensaciones nuevas, imágenes de las que antes no me había percatado. Hay cosas que sencillamente son muy dificiles de escribir, porque son muy gráficas. Se entenderían más a través de un dibujo, de una pintura, colores claros y verdosos. Pelo suelto, cuerpos livianos, correr. Árboles, césped, viento.
Emoción.
Un cuento de hadas, algún bosque encantado, su historia con las casitas en los huecos arboles.
ResponderEliminarUn baile, sí, eso me imagino, un baile. Y la fuga de los enamorados. Muy romántico, no? No me importa, es bella. Demasiado bella