viernes, 11 de octubre de 2013

Desconexión

Sé que todavía faltan dos meses para que este año termine, pero voy a hacer de cuenta por un momento que mi deseo se vuelve realidad, y de alguna manera viajé en el tiempo hasta el 30 de diciembre, fecha en la cual puedo dar mi opinión respecto a lo que el 2013 representó para mí. Quizás te preguntes cuál es mi apuro… bueno, dado que ya pasó más de la mitad del año, casi puedo saber qué características predominaron a lo largo de estos meses. Y debo admitir que estas características hacen que quiera dejar todo esto atrás de una vez por todas, y una manera de apurar el trámite sería con el lavado de cabeza que se produce durante las vacaciones, cuando hay tiempo para descansar sin culpa.
 _____________________________________________ 
Tengo una increíble facilidad para hacerme mierda sola, hablando claro y pronto. Quiero decir, los pocos avances que logré en estos - ¿Ya? – seis meses, los tiré a la basura en dos semanas. Así de fácil. Solo tuve que hacer presencia, y mi humilde mundito precariamente construido de superficialidades, se desmoronó ante el primer aliento de su voz. Mmm.. nah, exagero. En realidad todo se arruinó hoy, que tuve más tiempo para prestar atención. 
 _____________________________________________ 
Evidentemente no puedo conectarme con nada. Fue un año de distancia; los acontecimientos acaecidos en marzo, de alguna manera, me hicieron poner en off las emociones (mejor dicho, la expresión de las mismas) y por eso hace meses que no escribo nada decente en el blog. Cosa que me atormentó sobremanera. Donde antes había entre 5 y 7 entradas por mes, ahora había tan solo una, y muy tirada de los pelos. Es decir, “Mediocre” no es una entrada. No es un texto. Es tan solo una palabra idiota que buscaba rellenar el vacío de Barrita de Bonobon. En resumen: una porquería. Y debo decir que continuar con esta entrada también me está costando mucho. ¿Por qué? Porque no estoy conectada. Hace un par de semanas asistí a un taller de EFT (Técnica de Liberación Emocional), pero no pude experimentar ningún resultado, debido a mi falta de concentración. Siempre estoy cansada a pesar de no hacer demasiadas cosas durante el día, e involucionó mi capacidad de hablar en público. Desde marzo, mi principal compañía es la tristeza, la envidia, el apego excesivo. Me pierdo en mis cavilaciones con demasiada frecuencia y pronto olvido lo que estaba pensando. La gente me resulta poco interesante, y dejo pasar oportunidades. Y cuando, a pesar de mi evidente desinterés, alguien intenta inmiscuirse en mis afectos, me irrito y corto todo a menos diez. Y no sé qué más escribir, porque estoy desconectada. Y soy bastante idiota.

1 comentario:

  1. Muy bueno el blog, te dejo el mio

    http://cordurainsana.blogspot.com.ar/

    Nos leemos, saludos

    ResponderEliminar